Los taxistas se vuelcan con el incendio en una residencia de Sevilla

SEVILLA. OKDIARIO.- Los taxistas sevillanos se han volcado con el gran incendio producido en una residencia de mayores de la capital hispalense. Tal y como se puede apreciar en las imágenes, difundidas por Élite Taxi, los trabajadores no han dudado en apagar el parquímetro para ayudar en todo lo que pudieran en una larga noche, en la que una mujer ha perdido la vida por el incendio y más de 70 personas se han visto afectadas.

«Una fatídica noche para nuestros ancianos de la residencia de Baltasar Grasian que han sufrido un incendio en su lugar de descanso, por suerte el Servicio Publico estaba presente para ayudar», ha tuiteado la cuenta de Élite Taxi.

Incendio

Se trata de un edificio con sus alojamientos distribuidos como apartamentos, que cuenta con una capacidad máxima de 166 plazas, con 30 concertadas como centro de día, aunque anche solo tenía ocupadas 17 de esas 30, y en el total del edificio había 97 personas, que se intentaron desalojar a toda prisa, pero sin poder evitar la muerte de una de ellas.

El residencial ya fue noticia el pasado abril, cuando un brote de coronavirus afectó a 80 de las personas que viven en la zona de atención a dependientes, y ahora han vuelto a vivir una madrugada trágica, preocupados no solo de las personas ingresadas en los hospitales, sino de cómo intentar volver a la normalidad tras un suceso como el de ayer.

Por ahora, las causas del incendio no están claras, pero sí se ha cerrado el círculo en torno al lugar donde se produjo, una habitación de la segunda planta, lo que hizo que la primera no tuviese especialmente problema para ser evacuada, pero las plantas superiores, sobre todo la tercera, se convirtieron en un problema tanto para abandonarla los mayores como para acceder los servicios de emergencia.

El dispositivo puesto en marcha anoche fue un ejemplo de coordinación que contó con la participación improvisada de los propios vecinos de la calle Baltasar Gracián, del distrito San Pablo-Santa Justa, que se organizaron para buscar mantas, agua, bebidas clientes, pañuelos, y todo lo que se necesitase para ayudar a casi un centenar de personas que salieron con lo puesto para salvar la vida, a hombros de sus cuidadores haciendo una cadena humana.

A las imágenes de bomberos, policías y médicos trabajando, se unieron las de los vecinos lanzando mantas desde sus balcones, taxistas que llegaban a la zona para evacuar lo antes posible a quienes necesitaban transporte y autobuses públicos con sus rampas sacando a los ancianos del frío de la calle.

Con todo, fue “un trabajo titánico” de los servicios de emergencia, como lo define el alcalde, Juan Espadas, que llegó a la zona poco después de iniciarse el suceso, y mostraba “el agradecimiento a todos los dispositivos de urgencia movilizados en esta aciaga noche de Reyes».