La regulación del empleo de los conductores de Uber en el Reino Unido cuesta 500 millones

La tecnológica no logra cerrar con beneficios el trimestre tras mejorar las condiciones de sus trabajadores por orden del Tribunal Supremo británico

REINO UNIDO. EL PAÍS. DANIEL LARA.- Las victorias en materia laboral de los conductores de Uber están minando las cuentas de la empresa. Los resultados para el primer trimestre de 2021, publicados a última hora de este miércoles por Uber, reflejan un agujero de 600 millones de dólares (498 millones de euros) en forma de aprovisionamientos destinados a aumentar las prestaciones sociales de sus conductores en el Reino Unido, después de que una sentencia del Tribunal Supremo británico obligase a Uber en febrero a contratarles. En consecuencia, la tecnológica ha cerrado el trimestre con unas pérdidas de 108 millones de dólares (89 millones de euros).

Las acciones de Uber cerraron este miércoles con una caída del 3,4%, hasta alcanzar mínimos del mes de enero, y han continuado cayendo (-3,75%) en el mercado de fuera de hora. Más que las pérdidas trimestrales, la caída en Bolsa se ha producido por el reciente y sonado posicionamiento de la Administración Biden a favor de la contratación de los falsos autónomos en EE UU, especialmente en los sectores de reparto a domicilio y de servicio de taxis.

Este miércoles, los demócratas han retirado la llamada Norma del Contratista Independiente, impulsada por Trump poco antes del fin de su mandato, en enero, y destinada a facilitar el uso de autónomos por parte de plataformas como Uber, Lyft o Doordash, lo que ha castigado en Bolsa a estas empresas. “Con demasiada frecuencia, los trabajadores pierden importantes protecciones salariales cuando los empleadores los clasifican erróneamente como trabajadores independientes”, ha dicho este miércoles el secretario de Trabajo, Marty Walsh, en un comunicado.

Los accionistas de Uber temen que una posible regulación del empleo en EE UU cueste a la empresa mucho más que los 600 millones del Reino Unido, ya que Norteamérica supone el 63% de los ingresos de la empresa y, por ende, agrupa a muchísimos más conductores.

Tras la sentencia del Supremo británico, Uber se vio obligada a renombrar a sus conductores como “trabajadores”, que no “empleados”, lo que les asegura un salario mínimo durante sus trayectos (no en periodos de espera), vacaciones pagadas y contribuciones a la pensión. Pero no cubre las bajas por enfermedad, paternidad y tienen menos protección al despido que los empleados. Esta reforma no se aplicó a los repartidores de Uber Eats, que continúan siendo autónomos.

Uber recorta las pérdidas y se acerca a beneficios

Los resultados trimestrales de Uber muestran una mejora notable del negocio frente a trimestres anteriores, pese a las pérdidas de 108 millones. En el primer trimestre de 2020, parcialmente afectado por la pandemia, Uber perdió 2.936 millones. En el cuarto trimestre de 2020 perdió 968.

La mejora contable de la empresa, fundada en 2010 y con sede en San Francisco, se debió principalmente al recorte de gastos, entre ellos de personal, y al aumento de los ingresos. También tuvo un fuerte impacto la venta de su división de investigación y desarrollo de vehículos autónomos por la que ha ingresado este trimestre 1.680 millones de dólares.

La reapertura de la economía, especialmente en Asia y EE UU, permitieron a Uber aumentar los ingresos por viajes en un 14% frente al último trimestre de 2020. “Uber está empezando a funcionar a toda máquina”, afirma Dara Khosrowshahi, director ejecutivo de Uber, en la nota publicada el miércoles. “Más consumidores están volviendo a viajar con nosotros, a la vez que continúan utilizando la entrega de paquetes, un negocio en expansión”, añade.

La división de Uber Eats volvió a ser la que aupó a la tecnológica y ya representa el 63% de sus ingresos. La facturación de Uber Eats entre enero y marzo creció un 166% interanualmente y un 24% frente al último trimestre del pasado año. La división de transporte de personas continuó en niveles del cuarto trimestre de 2020, al igual que la de envío de paquetes.

En una conferencia con inversores, la cúpula de la tecnológica reconoció este miércoles que la contratación de conductores también mermará las cuentas de Uber para el próximo trimestre, reduciendo en un 20% el margen de beneficio por cada viaje, según cifras recogidas por Bloomberg, lo que también explica la caída en Bolsa de la tecnológica.