Competencia lleva ante los tribunales al Ayuntamiento por no liberalizar el taxi

  • Una de las protestas protagonizadas por el sector del taxi en Málaga. / Luis Moret
    Una de las protestas protagonizadas por el sector del taxi en Málaga. / Luis Moret

    El órgano estatal pretende que no se limite el número de licencias, que un empresario pueda poner una flota y que cada taxista fije sus tarifas

  • «Vamos a seguir defendiendo la ordenanza», advierte la edil de Movilidad

Málaga. diariosur.es. Francisco Jiménez.- Si los taxistas confiaban en que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) se echará atrás en su objetivo de liberalizar el sector a raíz del rechazo explícito del Ayuntamiento de Málaga, Junta de Andalucía y de profesionales de todo el país que participaron en la manifestación de septiembre, se equivocaban. El órgano estatal dependiente del Ministerio de Industria ha cumplido su amenaza y ha llevado al Consistorio malagueño a los tribunales por no modificar la nueva ordenanza municipal (aprobada en mayo) para permitir que cualquier persona o empresa pueda operar en la ciudad, se apliquen descuentos en las tarifas oficiales o se suprima el sistema de cupos vigente para dejar la puerta abierta a nuevas licencias.

Pese al informe jurídico presentado por el Consistorio argumentando que los artículos que se cuestionan son un extracto del reglamento andaluz del taxi en vigor desde 2012 tras consensuarlo con organizaciones del sector, sindicatos, asociaciones de consumidores y la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, la CNMC ha interpuesto un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para intentar derogar 16 de los 102 artículos de la normativa municipal al considerar que «obstaculizan significativamente la competencia efectiva en el mercado» al limitar el número de operadores presentes y su capacidad para que cada uno pueda fijar sus propias reglas del juego en precios y calidad. Unas «barreras no justificadas» que a su juicio van en contra de los intereses del consumidor.

Del devenir de este litigio estarán muy atentos los profesionales malagueños, pero también el resto porque si el juez avala la tesis de Competencia se daría un giro de 180 grados al sistema actual del taxi en todo el país. ¿Y por qué se fijó en Málaga cuando estas supuestas limitaciones se dan en toda la geografía nacional? El origen está en la denuncia que la Asociación Unificada Malagueña de Autónomos del Taxi (Aumat) presentó el 5 de junio para tratar de modificar varios artículos, un procedimiento que se ha vuelto en contra del colectivo en el momento en que el órgano regulador decidió entrar de lleno en toda la ordenanza, en un procedimiento similar al que se está desarrollando en Córdoba.

Únicas reacciones

Ha sido el propio ente estatal el que ha informado al Ayuntamiento de la presentación del recurso, un paso que no va a variar su postura de mantenerse firme. «Vamos a seguir defendiendo la ordenanza, y así se lo hemos trasladado a los taxistas tras recibir hace unos días el escrito de Competencia, porque la ordenanza viene avalada por un amplio consenso», afirmaba ayer a este periódico la concejala de Movilidad, Elvira Maeso, quien lamentó que la Consejería de Fomento no haya emitido el informe solicitado a comienzos de septiembre para respaldar sus argumentos. De momento, las únicas reacciones de la Administración andaluza han sido a viva voz, como las declaraciones del consejero Felipe López en el Parlamento alegando que la falta de regulación pondría en peligro «la calidad y seguridad de un servicio público».