Sin taxi los sábados noche por el “aumento de los problemas”

“Es un tema de inseguridad. En Vitoria-Gasteiz hay licencias de taxi suficientes, pero las noches de los sábados hay unas horas en las que han aumentado los problemas”, explica Ana Herrero, presidenta de la Asociación Alavesa del Taxi: “En algunos casos hay un ambiente un poco raro, aunque no podemos generalizar: el 99% de la clientela se comporta”.

Vitoria-Gasteiz vive desde 2022 una explosión festiva, y la fiesta se prolonga más que antes, en muchos casos con un tardeo previo. “Hemos cambiado los hábitos, se sale antes y bebes antes”.

“Hay gente que va muy pasada”, confirma la portavoz de los taxistas: “Nos han llegado a lanzar piedras y llaves al pasar por una parada de taxis y no parar porque ya estábamos en una carrera”.

El momento crítico es a partir de las 4 de la madrugada: “Los compañeros que hacen la noche se retiran a esa hora de los sábados porque es cuando se dan los problemas. Sabemos que el 99% de nuestros clientes no tienen la culpa. Pero es una lotería. A veces el que ves esperando en la parada y parece el más tranquilo es quien luego la lía”.

Así que los problemas de falta de taxis se producen entre las 4 y las 7 de la madrugada. Es el momento más conflictivo y el que más gente reclama su trayecto. “Las noches de los sábados hay mucho trabajo y encima es una tarifa de fin de semana. Pero prima la seguridad sobre la rentabilidad. Y hay un ambiente un poco raro”. Así que coincide una hora punta de la demanda con una hora valle de oferta: el combo perfecto para que conseguir taxi sea una lotería.

Esperas en paradas

Algo parecido ocurre en Coronación, “aunque a veces pasas y no sabes si alguien te está esperando porque está justo a la entrada de Jimmy, donde se congrega la gente”. La parada de Catedral tiene un flujo constante de gente, que aumenta con el cierre de los pubs y en la franja en que no hay servicio de Gautxori.

¿Cuáles son los problemas?

Los taxistas también han notado un aumento de los simpa en esas horas del fin de semana. Gente que, al llegar al destino, se baja del taxi y huye sin abonar el recorrido. Simpas que, en algunos casos, han llegado tras una carrera hasta un pueblo, fuera del casco urbano.

Así que, en las carreras con destinos más alejados, cobran por adelantado. “Policía Local nos dice que cobremos todas las carreras por adelantado en ese horario. Yo no puedo hacerlo en Vitoria porque la cuantía no es fija, pero sí cuando voy a un pueblo porque la cuantía va a ser X, dos euros arriba o abajo”.

Policía Local ha intervenido en ocasiones para expulsar de un taxi a una persona demasiado ebria. “Yo no tengo que enfrentarme con un cliente. Estoy trabajando. Yo llamé en una ocasión a Policía Local porque un pasajero se negaba a bajarse cuando le dije que no le llevaba. Y los agentes le terminaron bajando del taxi como pudieron”.

Además, los propios conductores son los titulares de la licencia: está prohibido que contraten a otros conductores, algo muy habitual en ciudades como Madrid. Por eso son los propios taxistas quienes se regulan su jornada de trabajo.

Sin problemas jueves y viernes

Entonces, ¿quién genera los problemas? “Son gente de todo tipo, no podemos decir solo un grupo concreto”. Pero los taxistas sí ven una coincidencia: todo esto ha aumentado a medida que el tardeo se ha asentado en Vitoria-Gasteiz: “Hay gente que bebe desde el mediodía hasta la madrugada”.

En cualquier caso, esta situación no es exclusiva de Vitoria-Gasteiz. En Pamplona, de hecho, ha habido distintas agresiones físicas en el último año y medio. Y eso, por suerte, aún no ha ocurrido en Vitoria-Gasteiz.