Los VTC doblan a los taxis en accidentes de tráfico en Madrid
Los conductores de Uber, Cabify o Bolt no tienen un horario de trabajo limitado y solo necesitan tener el carnet de conducir
Los datos de 2023 indican que los taxis han sufrido de enero a junio 457 accidentes en la capital, frente a los 588 registrados de los VTC. Hay que poner estos datos en contexto, ya que en Madrid hay 15.777 taxis y 8.300 VTC, aunque estos últimos recorren toda la Comunidad de Madrid. Los accidentes de los VTC han pasado de 46 en 2019 a 958 en 2022. Si siguen el ritmo de este año es probable que superen esta cifra en 2023. Sin embargo, la evolución de los taxis también ha sido ascendente, pero más regular: de 656 en 2019 a 766 en 2022.
El número de VTC que hay en Madrid se ha mantenido relativamente estable desde 2019, ya que las empresas entraron fuerte en la capital y concentran desde 2018 casi la mitad de las licencias que tienen en España. Las razones por las que hay más accidentes se encuentran en los escasos requisitos que ponen Uber, Cabify y Bolt para ser conductor. Solo se necesita el carnet de conducir —incluso llevando la L— una declaración jurada y en el caso de ser el titular, la licencia VTC. Los trabajadores reciben cierta formación para manejar el navegador de la empresa como única guía para recorrerse la ciudad. Y a conducir.
En la Comunidad de Madrid aún no está regulado ni un régimen sancionador ni un control para que los conductores tengan cierta formación y seguridad al volante. Una portavoz de la Consejería de Transportes, Infraestructuras y Vivienda, de la que dependen las licencias VTC, afirma que se está trabajando en una normativa que establecerá que “las empresas, vehículos y conductores tendrán que cumplir una serie de requisitos para el ejercicio de la actividad”. Parte de esos requisitos será un examen, del que aún no se conocen los detalles ni cuándo entrará en vigor, que tendrán que pasar todos los titulares de las licencias VTC y los chóferes asociados.
El caso de los taxis es diferente. Julio Sanz, presidente de la Federación de Profesionales del Taxi de Madrid, la agrupación con más representación dentro del sector, explica que, además de que ellos tienen que tener un año de carnet previamente, a los taxistas se les da una formación inicial antes de que salgan a la carretera: “Tenemos un centro de formación reconocido por el Ayuntamiento de Madrid para obtener la cartilla de conducción de autotaxis”. Es un curso de entre 20 días y un mes en el que les enseñan la normativa a la que se someten los taxistas, las tarifas de los precios y les dan un conocimiento básico de Madrid. “Cuando sales a la ciudad tienes que saber dónde están los sitios importantes: los hospitales, las estaciones o las puertas de urgencias”. Estas clases se pueden reforzar con un curso online aparte.
Sanz se encuentra a diario con coches VTC cometiendo las infracciones más básicas al conducir: “Nos los encontramos circulando por calles en dirección contraria”. Conocerse la ciudad es importante. Aunque no es exclusivo de los VTC, mirar continuamente el navegador en vez de la carretera hace que se puedan saltar la salida indicada y cometer temeridades para no perder el tiempo dando la vuelta. Todo son carreras. Su salario depende de ello. Los sueldos fijos rondan los 1.300 euros, pero deben alcanzar cifras entre 3.500 y 4.000 euros de beneficio al mes para obtener el 35% de lo que ganen a partir de ese objetivo.