Llega a Barcelona la obra de Francesc Torres en homenaje a las víctimas del 11-S
BARCELONA.EFE.- La instalación artística Memoria fragmentada. 11-S NY. Artefactos en el Hangar 17, un homenaje que el fotógrafo Francesc Torres rinde a las víctimas de los atentados del 11-S, se podrá ver a partir del próximo día 8 de septiembre en Barcelona, simultáneamente con Madrid, Nueva York y Londres.
En el décimo aniversario de los atentados de las Torres Gemelas, el CCCB (Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona) será una de las cuatro sedes del último trabajo del artista catalán, quien en abril de 2009 pudo documentar gráficamente durante cinco semanas y en solitario los más de 1.500 objetos que se almacenaron en el Hangar 17 del aeropuerto JFK de Nueva York, vestigios de aquellos hechos.
Rodeado de paredes grises, en un espacio de 24.000 metros cuadrados, con iluminación industrial, Torres pudo capturar la “resonancia emocional” del 11-S, así como el significado que tienen hoy los restos. “Trabajando de nueve de la mañana a seis de la tarde, solo y muy lentamente, sin tocar nada, hice inventario de lo que allí había. Salí exprimido para mucho tiempo”, ha confesado hoy.
Vigas completamente curvadas de 140 toneladas de peso, frágiles gafas que no se rompieron, coches de bomberos medio quemados, dos vagones del suburbano o un taxi sin techo son algunas de las 176 imágenes que el público podrá ver en la instalación artística ubicada en Barcelona, formada por seis paneles y un espejo.
Según Torres, aunque en las cuatro exposiciones las imágenes son prácticamente las mismas, la de la capital catalana, que se clausurará el 3 de noviembre, es la muestra “canónica”, y en la que también se mostrará un fragmento de la escultura WTC Stabile (1971), del norteamericano Alexander Calder, que presidía la plaza donde se alzaba el World Trade Center, y que acabó en un amasijo.
En el Imperial War Museum de Londres, la exposición es “como una versión de cámara” de las otras tres, más pequeña y más íntima, con un fragmento de cuatro grandes vigas, mientras que en el International Center of Photography de Nueva York (entre el 9 de septiembre y el 8 de enero de 2012), además de las imágenes, se podrá ver un pequeño barco de papel encontrado en el metro.
La exposición de Nueva York cuenta con el apoyo del Institut Ramon Llull, que celebrará en los próximos días el ciclo Catalan Days en la ciudad de los rascacielos.
En el caso de Madrid, la exposición se ofrecerá, entre el 16 de septiembre y el 31 de enero, en el Centro del Palacio de Cibeles y allí habrá la montura de unas gafas que no sufrieron ningún daño y el vestido de una mujer.
Francesc Torres, que reside en la ciudad de los rascacielos desde el año 2002, ha comentado que cuando acometió el proyecto -él que siempre ha estado muy interesado por temas relacionados con la memoria histórica- sólo tenía claro que “no quería hacer fotos artísticas sino buenas fotografías”.
Por otra parte, ha dado a conocer que vivió los acontecimientos muy de cerca, porque ese día se encontraba en un apartamento a apenas dos manzanas del World Trade Center y, al poco tiempo, bajó a la calle con su cámara fotográfica.
Asimismo, no ha escondido que una de las primeras llamadas telefónicas que efectuó, mientras el segundo avión impactaba en las torres, fue a su madre, ahora ya fallecida y que vivía en Barcelona, para contarle que a él no le sucedía nada.
En el libro que se hará con motivo de las exposiciones, aparecerán, precisamente, las imágenes fotográficas que su madre, una mujer ya mayor, tomó ese día en su sala de estar, en las que se ve la televisión emitiendo el suceso.
El conseller de Cultura, Ferran Mascarell, ha alabado durante la presentación del proyecto el trabajo de Torres por lo que supone de “mirada” a la memoria, mientras que el director del CCCB, Josep Ramoneda, ha mantenido que el artista visual es el artífice del “primer gran homenaje artístico a las víctimas del 11-S”.