La falta de ocio nocturno ralentiza la normalización del taxi y el metro
Muchos conductores seguirán quedándose en casa y el subterráneo continuará cerrando a la medianoche
BARCELONA. LA VANGUARDIA. LUIS BENVENUTY.- La falta de ocio nocturno y la escasez de turistas ralentizarán la recuperación de la normalidad del taxi y del metro de Barcelona y su área metropolitana. A pesar del fin del toque de queda, uno y otro mantendrán buena parte de sus limitaciones.
El Institut Metropolità del Taxi (Imet) ha decidido anular el decreto que amparaba la reducción del número de vehículos que salen a trabajar cada día, en tanto que el fin del estado de alarma le deja sin instrumentos legales para ello. Pero las principales asociaciones del sector entienden que, dadas las circustancias, la demanda de taxis apenas se incrementará, apenas un tanto durante las últimas horas de la tarde y las primeras de la noche. De modo que los profesionales han acordado que durante los días entre semana, tal y como se viene haciendo desde hace meses, continuará trabajando únicamente el 60% de la flota, y los fines de semana, en lugar de hacerlo una cuarta parte, lo hará la mitad.
En unas cuantas céntricas paradas bien atestadas, entre los vehículos aparcados en doble y a veces triple fila, los conductores coinciden en que no tiene sentido que trabaje más gente, que no hay trabajo suficiente para todos, que, incluso en los lugares tradicionalmente más transitados, fácilmente tardas una hora en encontrar un cliente, y luego vuelta a esperar…
De todas formas los taxistas no bajan la guardia. La falta de ocio nocturno y la escasez de turistas también está afectando a sus principales competidores, a Uber y Cabify. Pero a medida que se recupere la demanda la disputa por los clientes y la supervivencia será especialmente cruenta. Élite Taxi anunció ayer que el día 20 montarán una marcha lenta por las calles de Barcelona para protestar contra la presencia de Uber y Cabify en el área metropolitana. La principal asociación de taxistas dice que no quieren desatar el caos en Barcelona, pero los taxistas entienden que sus competidores esperan que se relajen a fin de asentarse en la urbe y luego expulsarles.
La recuperación de la normalidad del metro también será lenta. Este servicio mantendrá los horarios establecidos durante el toque de queda. De modo que continuará cerrando a la medianoche y prescindiendo del servicio nocturno durante los sábados y las vigilias de festivo. Fuentes de Transports Metropolità de Barcelona (TMB) detallan que ante la falta de ocio nocturno no tiene sentido prolongar de nuevo el horario del metro. A pesar de ello TMB detalla que incrementarán el paso de convoyes a última hora para prestar servicio a la gente que salga a cenar.