El taxi se mueve para buscar una salida unitaria a la crisis

BARCELONA. EL PERIODICO. CARLOS MÁRQUEZ DANIEL.- Cuando los representantes de un colectivo no logran limar asperezas para alcanzar una decisión que beneficie a todos, lo mejor es dejar que los implicados directos tomen la palabra y se mojen para moldear su propio futuro. En el sector del taxi, con una facturación que ha bajado entre el 15% y el 30% en los últimos dos años, urge tomar medidas al margen del eterno conflicto de intereses entre las distintas organizaciones que hablan en nombre del sector de manera desigual. Ahora, a través de una consulta que se celebrará los días 12 y 13 de noviembre, serán los chóferes propietarios de una licencia quienes decidirán qué aspectos de su trabajo deben cambiar para remontar el vuelo.
El usuario del taxi podría preguntarse, con razón, cómo puede beneficiarle un asunto tan interno de la profesión. El objetivo último de la consulta es quitar coches de la calle en un momento en el que hay mucha menos demanda para el mismo número de taxistas. Puede que solo sea una mejora en el estado de ánimo de quien conduce junto al taxímetro, pero supone también unificar criterios por primera vez en años. Y lo que es más importante, podría sentar un precedente de cara a futuras decisiones, como la supresión de suplementos o la pronta aprobación de taxis de siete plazas.
Al fin y al cabo, un taxista contento es un taxista que da mejor servicio. Y quién sabe, con una facturación aceptable en meses venideros, puede que las tarifas no suban como lo harán en el 2012 (+2,9%).

ADMINISTRACIÓN ATENTA

El Instituto Metropolitano del Taxi (IMT) aseguraba ayer, a través de un portavoz, que estará «muy atento» al resultado de la consulta. «El tema de la regulación horaria es una de las medidas que estamos contemplando, pero nos preocupa que en otras ciudades que lo han aplicado hayan tenido problemas técnicos. Tenemos claro que elegiremos la opción técnicamente más viable», concretaban las mismas fuentes. El IMT no solo estará atento a la consulta, organizada por el Stac y la Utam, sino que no tomará ninguna decisión «sin antes consensuar con todo el sector».
Los taxistas podrán ejercer el derecho a voto en FiraTaxi (Fira de Barcelona) y en la T-1 del aeropuerto.