El Institut Metropolità del Taxi rechaza el proyecto del Govern para las VTC
El decreto ley que el Ejecutivo quiere aprobar antes de finales de julio, no fija la ansiada ratio de un VTC por cada 30 taxis que reclaman los taxistas
El Govern prevé multar entre 2.001 y 6.000 euros e inmovilizar al vehículo a los de fuera de la comunidad autónoma
BARCELONA. EL PERIÓDICO DE CATALUNYA.- Horas después de hacerse público el borrador del decreto ley del Govern para la regulación de las VTC (vehículos de alquiler con conductor), el Institut Metropolità del Taxi (Imet) ha rechazado de plano el texto por no obedecer al espíritu que, según el organismo, reclamaba la medida. “Además de haber llegado con 40 días de retraso, el borrador no se corresponde con la necesidad de regulación, y esta propuesta lo único que hace es perpetuar la precariedad del sector y la competencia desleal que suponen las VTC respecto al sector público del taxi”, ha señalado Laia Bonet, presidenta del Institut Metropolità del Taxi y teniente de alcalde de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona.
Bonet considera que el Govern tiene que reformular su propuesta para que garantice, en la línea de lo que reclama el sector, “la recuperación del histórico equilibrio que debería existir entre el taxi y las VTC”. Y ha insistido en que el borrador no tiene el apoyo del ayuntamiento, “porque es preciso que regule de una forma más detallada en qué casos y condiciones las VTC han de ser posibles”. El borrador del decreto, que debe regular la actividad urbana de las VTC y que el Ejecutivo quiere tener listo para antes de finales de julio, no fija la ansiada ratio de una VTC por cada 30 taxis que reclaman los taxistas, pero sí prevé que no puedan emitirse nuevas licencias y que estas no puedan transmitirse cuando la autorización sea para circular en el interior de ciudades.
Según el borrador, el Govern prevé conceder autorizaciones para circular por vía urbana solamente a los VTC (vehículos de alquiler con conductor) con licencia domiciliada en Catalunya y con un vehículo adscrito de forma permanente, así como multar con entre 2.001 y 6.000 euros e inmovilizar el vehículo a los de fuera de la comunidad.
Así consta en el borrador de decreto ley de medidas urgentes para regular este tipo de vehículos, al que ha tenido acceso Efe, que el Govern quiere aprobar con una vigencia de dos años, prorrogables durante otros dos, a la espera de que, cuando se disipen las dudas jurídicas sobre esta cuestión, se prepare una ley más amplia que regule aspectos que no pueden tratarse vía decreto.
Antelación de 6 meses
“Las autorizaciones de alquiler de vehículos con conductor de ámbito urbano no son transmisibles excepto en los supuestos, en caso de titularidad por parte de personas físicas, de muerte, jubilación o incapacidad de su titular, en favor de sus herederos forzosos”, señala el borrador.
Para poder operar estos vehículos en ámbito urbano, además, se deberá “ser titular de una autorización de alquiler de VTC de ámbito estatal domiciliada en Catalunya, con un vehículo permanentemente adscrito con una antelación mínima de 6 meses respecto a la entrada en vigor de este decreto”, indica el texto.
En la práctica, esto supone impedir que operen VTC de otras comunidades (lo que los taxistas denuncian que sucede en lugares como el Aeropuerto de El Prat) y estabilizar las licencias ya existentes en Catalunya, un total de 3.066, si bien el Govern cifra en 1.455 las licencias realmente activas. Además, solo la mitad corresponden a plataformas como Cabify o Uber —ambas en el punto de mira del sector del taxi–, y el resto son de uso tradicional para actividades como bodas o entierros.
El texto también endurece el régimen sancionador, con sanciones que pueden alcanzar, en los casos más graves, cuantías de entre 4.001 y 6.000 euros, y habilita a los cuerpos de seguridad a inmovilizar los vehículos de forma inmediata cuando detecten algunas infracciones muy graves.
Otros requisitos indicados en el borrador ya los había adelantado el Govern: se iguala el precio de los seguros de responsabilidad civil que deben pagar los conductores de VTC y los de taxis; se obliga a los conductores de VTC a tener permiso de conducir desde hace más de un año; cada licencia de VTC deberá estar asociada a un vehículo en concreto; y se abre la puerta a que entes locales como el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) impongan formaciones específicas y fijen horarios obligatorios.
Además, el decreto replica la mayoría de las condiciones establecidas en otra norma autonómica (que decaería de forma automática), como la prohibición de aparcar en la vía pública o recoger a clientes directamente de la calle, así como los 15 minutos de espera obligatorios para clientes que soliciten un VTC o la prohibición de usar geolocalización antes del servicio.
Falta de respeto
Élite Taxi ha pedido una reunión “urgente” con el Govern para que les dé explicaciones sobre el nuevo decreto que prepara para regular los trayectos urbanos de las VTC. El portavoz de la entidad, Tito Álvarez, que ha considerado “una falta de respeto” haberse enterado del tema por los medios de comunicación, ha alertado de que “si la línea del decreto ley es la que se está diciendo y no hay ha ninguna restricción ni limitación cuantitativa” de los VTC, saldrán a la calle “y muy pronto”.
Álvarez ha exigido el encuentro “para esta misma semana”, y ha advertido de que si no se produce, “la gente va a salir a la calle”: “Nos plantaremos en la Gran Via”. “Aquí no vamos a permitir lo que está pasando en Madrid de ninguna de las maneras”, ha asegurado el portavoz de la formación.