El coche autónomo desembarca en San Francisco en forma de taxi
- Cruise, filial de General Motors, abre al público la oportunidad
- Desde 2013, Cruise ha recorrido más de 3 millones de km
USA. EL ECONOMISTA. ANKOR TEJEDOR.- En pleno arranque de la expansión del vehículo eléctrico, Cruise, la filial de tecnología de General Motors, ya ha dado sus primeros pasos en la irrupción de vehículo autónomo.
Si bien es cierto que Reino Unido y Alemania ya han dado los primeros pasos para regular el uso de este tipo de vehículos en sus carreteras, Cruise ha ido un paso más allá y ya ha abierto al público la oportunidad de montarse en un vehículo 100% eléctrico y completamente automatizado.
La opción de circular en este tipo de vehículos estaba reservada a unos pocos privilegiados de la compañía. Hasta inicios de este mes, cuando Cruise decidió abrir al público en general esta posibilidad. No han sido los únicos, pues algunos empleados de General Motors también han podido disfrutar de esta nueva tecnología.
Así, la compañía ha abierto la opción de que los usuarios puedan registrase a través de una web con el objetivo de que puedan disfrutar de un viaje en taxi sin conductor por las calles de San Francisco a través de un Chevrolet Bolt completamente eléctrico. ¿El coste? Gratis, por ahora, pues no se descarta que tenga un coste en el futuro.
La consejera delegada de General Motors, Mary Barra, calificó su primer viaje sin conductor como “surrealista” y “un punto culminante de su carrera” como ingeniera. Me siento exactamente de la misma manera y no puedo esperar a que lo pruebes por ti mismo. No hay mejor lugar para empezar que en San Francisco, un lugar donde se anima a pensar en grande, independientemente de lo escandalosas que puedan parecer sus ideas. Gracias Cruisers, y gracias San Francisco.
Esta división del gigante norteamericano cerró el ejercicio 2021 con unas pérdidas ajustadas antes de impuestos por valor de 1.057 millones de euros (1.196 millones de dólares), un 34,8% más en tasa interanual. La facturación de Cruise en 2021 alcanzó los 93,7 millones de euros (106 millones de dólares), lo que supuso un incremento del 2,9% en tasa interanual.
Tras estos avances se encuentran inversores como Softbank, que en 2018 invirtió 900 millones de dólares en Cruise. En dicho acuerdo de inversión se contemplaba una inversión adicional de 1.196 millones de euros (1.350 millones de dólares) en el momento en el que Cruise comenzase a operar los vehículos autónomos. El consejero delegado de Cruise, Kyle Vogt, explicó que este capital adicional le permitirá a la compañía incrementar la plantilla y escalar la tecnología en San Francisco y en otras ciudades.
Pero los inicios de Cruise se remontan allá por 2013. De hecho, desde entonces la compañía ha recorrido más de 3,2 millones de kilómetros (2 millones de millas) en pruebas de conducción autónoma. Además, esta división cuenta con más de 300 vehículos autónomos completamente eléctricos en San Franciso y Phoenix, así como más de 1.900 empleados.
En 2016, General Motors compró la startup Cruise Automation por un valor de 1.000 millones de dólares en efectivo y acciones. En la actualidad, esta división de vehículos autónomos está valorada en más de 26.462 millones de euros (30.000 millones de dólares).
Los grandes fabricantes de vehículos se han dedicado en los últimos tiempos a hacerse con participaciones importantes de otras startups centradas o bien en los vehículos eléctricos o en la conducción autónoma. Porsche ya posee el 24% de la startup Rimac, una compañía centrada en el desarrollo de vehículos hiperdeportivos completamente eléctricos. De hecho, a mediados del año pasado Porsche y Rimac anunciaron la creación de una compañía conjunta en la que se incorporó Bugatti, perteneciente al Grupo Volkswagen.
En la nueva empresa, Rimac ostenta una participación del 55%, mientras que Porsche tiene el 45% restante. Bugatti fue traspasado a la nueva sociedad de riesgo compartido a través del grupo Volkswagen y después se traspasó la participación a Porsche.
Hyundai, por su parte, también realizó una operación similar en 2021 al comprarle a Softbank el 80% de la empresa especializada en robótica Boston Dynamics, en una operación valorada en unos 1.100 millones de dólares. Esta compañía es mundialmente conocida por sus prototipos de robots con forma humana que logran andar, hacer alguna que otra operación e incluso bailar. El 20% restante de Boston Dynamics sigue en manos de Softbank. Con esta operación, el grupo surcoreano pretende desarrollar tecnologías avanzadas que mejoren la vida de las personas y promuevan la seguridad, haciendo realidad de este modo el progreso de la humanidad.
También se espera que el acuerdo permita al Grupo Hyundai y a Boston Dynamics aprovechar sus respectivos puntos fuertes en fabricación, logística, construcción y automatización. Juntos, el consorcio y Boston Dynamics crearán una cadena de valor relacionada con el mundo de la robótica, desde la fabricación de componentes robóticos hasta el desarrollo de soluciones logísticas inteligentes.