El taxi catalán pide medidas para frenar la escalada de violencia

LA GACETA DEL TAXI. JAVIER IZQUIERDO.- El brutal asesinato a un taxista en Lleida ha dejado consternado al sector del taxi en Catalunya. Dos décadas después, un profesional del colectivo del taxi ha perdido la vida mientras conducía su vehículo de forma cruel y violenta. Asociaciones como el Sindicat del Taxi de Catalunya (STAC), por medio de su presidente Luis Berbel, insisten en la necesidad de actualizar las medidas de seguridad para los taxistas ante la escalada de hechos violentos que se está produciendo en los últimos meses en el taxi catalán.

Mohamded, conocido entre sus amigos como Simu, fue asesinado durante la madrugada del pasado domingo 10 de abril en Lleida mientras ejercía su profesión de taxista. Recibió 20 puñaladas al bordo del taxi que conducía y con 43 años perdió su vida dejando huérfanos a dos niños pequeños. Aún se desconocen los detalles de este brutal hecho, cuya investigación por los Mossos d´Esquadra todavía permanece abierta.

En torno a las 2.30 de la madrugada del citado día, este taxista se encontraba en la avenida Blondel en Lleida cuando alguien pidió solicitó un servicio y le trasladó hasta la calle Sifó. Tras eso, lo siguiente que se conoce es el testimonio de una persona que se encontró gravemente herido al taxista en el suelo, lleno de puñaladas a 50 metros de su taxi que aún tenía el motor en marcha.

El profesional fue trasladado al hospital gravemente herido, pero tras tres horas de lucha, finalmente falleció en el hospital. Lo único que se sabe al cierre de esta edición de la investigación es que días antes Mohamed había denunciado a una persona por amenazas y los investigadores no descartan que esté relacionado con el crimen, aunque la principal hipótesis es que haya sido víctima de un robo con mucha violencia por parte de otra persona.

Setenta taxis de Lleida realizaron una marcha lenta días después del asesinato por las calles de la ciudad en memoria del compañero fallecido. Los taxistas finalizaron la marcha depositando tres ramos de flores y una vela en el punto donde se produjeron los hechos.

El sector del taxi de Catalunya que recibió esta noticia con absoluta perplejidad. Las principales organizaciones recuerdan que ya son meses en los que el colectivo viene denunciando una escalada de violencia y conocer una desgracia de este tipo no ha hecho más que encender aún más sus peticiones ante lo que están viviendo en distintos puntos de la geografía catalana.

Meses violentos sobre los taxistas

Luis Berbel, presidente del Sindicat del Taxi de Catalunya (STAC), explica en esta entrevista concedida a La Gaceta del Taxi las preocupaciones del sector con respecto a la seguridad ante esta escalada de hechos que, tal y como asegura, “cada vez son más violentos”.

Gaceta del Taxi. – ¿Cómo se enteraron de la noticia del fallecimiento del compañero de Lleida?

Luis Berbel. – Nos enteramos por los medios de comunicación y también algunos compañeros en Lleida nos avisaron. Los hechos sucedieron el 10 de abril de madrugada y aún no se conocen las causas porque la investigación sigue abierta. Parece ser que de madrugada el compañero cogió a una o varias personas en la estación de autobuses de Lleida y les trasladó hacia una calle y ahí fue cuando se produjo la brutal y mortal agresión. Estamos consternados, muy doloridos y afectados porque habían pasado 20 años, desde el año 2002, cuando se produjo la última muerte de un taxista en Catalunya por una agresión.

G.T.- ¿Y qué sensación le deja el hecho de que se produzcan hechos de tanta violencia?

L.B.- Nos deja muy afectados. Estamos al servicio del público y hoy en día por un intento de robo no tiene sentido que haya tanta violencia porque no llevamos efectivo. El 80-90% de los servicios se hacen a través del pago con tarjeta o son servicios de emisoras. Además, te deja peor sensación saber el cómo se produjo, con un montón de puñaladas y con ensañamiento. Es algo que ya estábamos comentando con la administración, porque ya se habían producido hechos muy violentos en los últimos tiempos. No nos cuadran las cifras que nos dan los Mossos d’Esquadra en cuanto al número de violencia, atracos y robos en el taxi. No concuerdan con la sensación que tenemos de peligrosidad a pie de calle. Tenemos compañeros agredidos recientemente en Sitges, en Girona, en Barcelona y en Sabadell, donde han pegado una paliza a un taxista que casi no lo cuenta.

G.T.- Hace unos meses, en otoño de 2021, desde el sector del taxi en Catalunya plantearon a la administración la necesidad de que dejen instalar cámaras de seguridad para disuadir a quienes quieran cometer actos violentos en el taxi. Hubo hasta una manifestación. No parece que haya reacción o solución al respecto.

L.B.- De momento no. Y repito, lo que hay que destacar la violencia en la que se producen estos hechos. No solo agreden a los taxistas, es que se ensañan con ellos. En Hospitalet igual le destrozaron recientemente el coche a un profesional porque les dijo que no bebieran en el interior del vehículo. Estamos observando una agresividad muy grande con los taxistas.

Un taxista asesinado veinte años después

G.T.- ¿Nota que coincide esta escalada de violencia con el fin de la pandemia?

L.B.- Todos estos hechos que le he relatado se han producido después de la pandemia. Se ha producido una vez que lo peor de la crisis ha ido bajando. Por ese motivo, y como recordaba, ya en el pasado mes de octubre de 2021 se hizo una primera reunión de la Comisión de Seguridad del taxi de Catalunya. Posteriormente se ha celebrado otra en enero, y ya se conocen tres o cuatro puntos que estamos demandando. Uno de ellos es permitir la instalación de cámaras; otro, mejorar el sistema de seguridad del 112 que es obligatorio a nivel del Área Metropolitana de Barcelona, pero no en todo Catalunya, donde es voluntario. Luego también pedimos trabajar en la formación a los taxistas, para que sepan de qué forman tienen que actuar. Son puntos básicos en los que se debe trabajar.

G.T.- ¿Qué les dice la administración con respecto a las cámaras?

L.B.- El AMB en este asunto se escuda en el tema de la protección de la imagen y los datos personales. Lo que nos parece más grave de todo esto es que no hacen nada, están ahí estancados y la situación está parada. Ellos no quieren iniciar nada porque dicen que puede haber una mala utilización de las imágenes, pero tenemos claro que esa no debe ser la razón para negarse. Si alguien utiliza mal las cámaras, que se le abra un expediente y si es necesario que se le ponga una sanción ejemplar. Pero no por eso se nos debe negar. Se debe establecer un protocolo para la protección de imágenes y datos. Sabemos que las cámaras no pueden enfocar al exterior, que solo al interior y nada más, pero es como cualquier otro negocio. Habrá que firmar unos permisos, pero igual que cualquier comercio. Estamos en las ciudades llenas de cámaras, desde el Metro, los cajeros, o simplemente cuando estás circulando, y no hay ningún tipo de problema. Pero el AMB, con la excusa de que pueden ser mal utilizadas, no hace nada. Oye, quien lo haga mal que se le ponga una sanción dura y punto. No puede ser que por eso no se permita. Consideramos que puede crear un efecto disuasorio porque, aunque tengamos otros sistemas de seguridad, se está viendo que no es suficiente.

Nos parece grave que el AMB no haga nada con las cámaras”

G.T.- Tras los hechos ocurridos en Lleida, ¿ha variado algo la situación al respecto?

L.B.- Hemos tenido una reunión con la administración y lo hemos propuesto. Queremos que cualquier persona que quiera pueda instalar estos sistemas de seguridad. Si alguien quiere una mampara, que lo haga. En el tema de las cámaras igual. Se ha hablado de una solución y es que las cámaras estén vinculadas al sistema 112 que solo cuando se activen las cámaras se graben las imágenes. Es una solución intermedia y estamos a la espera de a ver qué nos dice la administración al respecto. Sí que ha existido un compromiso de volver a convocar la Comisión de Seguridad del taxi de Catalunya y volveremos a insistir con estos temas.

G.T.– Un sistema de protección histórico al que hacía referencia siempre fue la mampara, pero no está establecido este sistema en todos los taxis.

L.B.- El problema que nos encontramos con las mamparas es que su lugar coincide donde vienen instalados normalmente los airbags. Entonces, nos tendrían que modificar los vehículos. Tendrían que eximir al taxi de llevar esos airbags completos, como pasa con la policía o los bomberos, u otros servicios que lo tienen desactivado. Que nos autoricen. Así, de esa forma, se evita lo que sucede ahora que, si un titular quiere homologar una mampara, tiene que hacer una serie de papeles que son costosos. Creo verdaderamente la mampara es el mejor de los sistemas porque hay una separación entre el conductor y el usuario y es un sistema totalmente disuasorio. Es verdad que nosotros utilizamos vehículos particulares, adaptados un poco par prestar servicio de taxi. Pero no existe un modelo específico, como en Londres, donde cuentan con un coche con espacio entre el conductor y el usuario.

La mampara es uno de los mejores sistemas de seguridad”

G.T.- También ha hecho referencia a la necesidad de mejorar el sistema del 112 integrado en el taxi.

L.B.- En la última reunión que mantuvimos con la administración también se habló de mejorar el sistema de alarma del 112. Es obligatorio en el Área Metropolitana y pretendemos, no ya solo que se haga extensible a más zonas de Catalunya, sino que funcione de manera correcta y se adapte a las tecnologías actuales. Hay que tener en cuenta que este sistema se puso en marcha justo después del último asesinato que se había producido en el taxi que fue en el año 2002. En este caso fue un taxista de Barcelona que lo mataron en Sabadell. Imagina a si lleva tiempo este sistema. En este sentido si consideramos que el taxi del AMB es privilegiado por poder contar con esta ayuda de seguridad, que es obligatorio en la zona metropolitana, pero queremos que funcione mejor de lo que está haciendo. No vamos a renunciar a ninguna mejora, pero queremos que se actualice.

El taxi de Barcelona tendrá su propia app pública

Aunque el tema de la seguridad en el taxi de Barcelona está en stand by, el Instituto Metropolitano del Taxi (Imet) y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ya han presentado Picmi Taxi, la nueva funcionalidad que próximamente se incluirá dentro de la app AMB Mobilitat, a través de la cual los usuarios podrán solicitar servicios de taxi. En los próximos meses empezarán las pruebas y se espera que esté disponible para el último trimestre de 2022.

El objetivo de Picmi Taxi es digitalizar las peticiones que habitualmente se realizan a mano alzada y que son los servicios más frecuentes para los taxistas. Todos los profesionales del AMB van a tener que estar obligadamente conectados a esta aplicación, lo que quiere decir que de lunes a viernes habrá alrededor de 8.000 taxis a disposición en la app.

Desde el taxi de Barcelona han manifestado estar muy contentos por tratarse de una aplicación 100% pública y ser pioneros en que se implante en el taxi en España. Las asociaciones sector consideran que esta app va a ayudar a mejorar la eficiencia del servicio porque los taxis que no estaban conectados a ninguna aplicación ahora lo estarán y se sumarán a los profesionales que ya trabajaban con emisoras y aplicaciones.