"¡Manolo, que me ha explotado el taxi!"
BARCELONA. LAVANGUARDIA DIGITAL.MÀRIUS FORT.- El conductor del taxi que ha explotado este miércoles en Barcelona es “¡Manolo, que me ha explotado el taxi!”un hombre de nacionalidad española de unos 50 años que responde a las siglas M. C. Ayer martes llevó su vehículo, un Toyota Prius, al taller Manusan, en el barrio de la Verneda, uno de los establecimientos que en el área metropolitana de Barcelona transforma taxis a la tecnología GLP, como el que ha explotado hoy.
Manolo Otero, responsable de dicho taller, explica a LaVanguardia.com que el coche de M.C. marcaba ayer erróneamente la cantidad de combustible de gas del coche y que por esta razón el taxista acudió a su establecimiento. Al analizar el problema que presentaba el vehículo, siempre según la versión de Otero, el taller procedió a “anular la válvula” para que el coche no funcionara a gas. El taller no disponía ayer de la pieza para cambiar -“el reloj que marca el gas”, en palabras de Otero- y emplazó a M. C. a regresar al día siguiente, es decir, hoy.
M.C. ha llamado esta mañana al taller preguntado por la pieza, que todavía no había llegado. “No le iba de un día de ir con gasolina”, ha explicado Otero. Al cabo de media hora de esta primera llamada, M. C. ha vuelto a telefonear al taller. “¡Manolo, que me ha explotado el taxi!”, ha explicado el responsable del taller que le ha dicho voz en grito por teléfono el taxista, a quien conoce “de hace años”.
“Él manipuló el coche”, ha señalado Otero. “(M. C.) le dijo a la chica que tengo en el taller que iba a repostar (gas), que iba a hacerlo de todos modos”, ha reiterado Otero. “Lo que debería haber hecho yo es no dejarlo salir del taller”, ha admitido y ha recordado que M. C., que “siempre va mal de dinero, como todos”, transformó su coche de híbrido a la tecnología GLP “hace una o dos semanas”. Otero ha señalado que tras lo sucedido hoy todo el taller “está a punto de llorar”.
Por su parte, Toyota ha asegurado que “es técnicamente imposible que un Toyota Prius de serie y sin modificaciones explote en las condiciones que se aprecian en las imágenes” y que ha enviado un técnico a Barcelona para analizar el vehículo. Además, Toyota “desaprueba la modificación” de cualquiera de sus vehículos “mediante la instalación de GLP” ya que “no cumplen los requisitos” de la compañía para su aprobación técnica.
