Las recomendaciones del Pacto de Toledo tendrán efecto negativo en las pensiones de los autónomos
MADRID.- Una vez conocidos los contenidos del borrador del acuerdo parlamentario para la renovación del Pacto de Toledo, que será votado a finales de este mes por el Congreso de los Diputados, la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos valora que algunas de las recomendaciones contempladas en el mismo pueden suponer una merma importante en las pensiones futuras de los trabajadores autónomos.
En particular, el cambio en el periodo de cómputo para el cálculo de la pensión de quince a veinte años afectará negativamente a un colectivo que ya cuenta con una pensión media inferior en un 41% a la correspondiente al Régimen General. Si este periodo además se alarga, como parece deducirse del texto, hasta los veinticinco años en un periodo inmediatamente posterior, el efecto aún será mayor, y la brecha en términos de protección social de los autónomos se agrandará con respecto al resto de los trabajadores. La decisión, en caso de que así la ratifique el proyecto del Gobierno, llegará sin la suficiente cobertura informativa previa, que hubiera permitido mejorar la carrera de cotización de los autónomos en fases de edad anteriores.
Por otra parte, el Gobierno anuncia que, aunque no se recoge expresamente en el borrador, podría modificarse la edad legal de jubilación hasta los 67 años. UPTA considera que esta medida no es sólo ineficaz en este momento, sino que resulta especialmente injusta para el colectivo de autónomos, cuya edad de jubilación real en la actualidad corresponde a los 65 años efectivos, y no a los casi 63 del resto del sistema. “Varias decenas de miles de autónomos mantienen sus cotizaciones más allá de la edad legal establecida, lo que demuestra que este es un colectivo en el que se podría incentivar con más eficiencia la conveniencia de continuar la cotización voluntaria, sin que una nueva obligación legal perjudique a los grupos más débiles y que sufren las dificultades objetivas actuales”, apunta Sebastián Reyna, secretario general de UPTA España.
Sin embargo, UPTA considera que, más allá de este efecto general sin duda perjudicial, las propuestas contempladas en el documento, que tienen un carácter específico para los afiliados al Régimen Especial de los Trabajadores Autónomos, tienen un valor positivo y responden a las propuestas presentadas en la audiencia parlamentaria que mantuvo nuestra organización ante la Comisión del Pacto de Toledo.
En primer lugar, se consolida la tendencia para la articulación exclusiva de dos grandes Regímenes de Seguridad Social, el de los trabajadores por cuenta ajena y el de los trabajadores por cuenta propia, de esta forma se evitan situaciones excepcionales y permite una mejor administración general del sistema.
Se reconoce la oportunidad de alcanzar una protección social equiparable entre ambos regímenes, en especial en materia de incentivos para continuar la actividad más allá de la edad legal de jubilación, así como para la jubilación anticipada y el trabajo a tiempo parcial.
El documento manifiesta explícitamente que sería necesario posibilitar incentivos fiscales para la regulación de los colaboradores familiares y el reconocimiento de carreras de cotización propias no subsidiarias de los titulares de negocios familiares. Particularmente, se recomienda buscar modelos que permitan la incorporación al sistema de los colectivos que actualmente quedan fuera, como el de los trabajadores en régimen de ayuda familiar. El borrador de acuerdo se define a favor de avanzar en una progresiva aproximación de las bases de cotización en el RETA a los ingresos reales, pero propone que este objetivo se aborde de forma progresiva y gradual.
En este sentido, los autores del documento establecen que las propuestas del Gobierno deben tener en cuenta la especificidad del trabajo autónomo, así como los mecanismos que permitan la participación activa de los trabajadores autónomos en los procesos que les afectan.
Se hace referencia a la necesidad de trasladar suficiente información al colectivo, con el fin de que valore adecuadamente la protección social que el sistema les permite. Se recomienda una especial atención al grupo de trabajadores autónomos económicamente dependientes.
También se indica la idoneidad de crear sistemas de previsión social complementaria adaptados a las necesidades de los trabajadores autónomos, a través de planes de pensiones que puedan ser rescatados en caso de cese de actividad o por pérdidas continuadas.
UPTA espera que las propuestas definitivas del Gobierno y el posterior proceso de trámite parlamentario maticen gradualmente las principales propuestas del documento que pueden afectar negativamente el futuro de las pensiones de los jubilados autónomos, “que se deseche definitivamente la modificación de la edad legal de jubilación y que se avance en el contenido de las recomendaciones positivas que se establecen por lo que se refiere específicamente a los trabajadores por cuenta propia”, concluye Reyn