Tras la votación de un decreto en el Senado del que sospechan que podrían allanar el camino de entrada a multinacionales como UBER, el sector del taxi en Italia se ha unido en una protesta que ha dificultado el servicio en las ciudades más importantes de Italia.

Las movilizaciones y huelgas de los taxistas se iniciaron el jueves preocupados por la enmienda al decreto Milleproroghe –un decreto ley aprobado por el Consejo de Ministros italiano-, que según su parecer, tiene como principal misión favorecer la entrada de empresas multinacionales que harían competencia directa al sector del taxi.

Las protestas de los taxistas han provocado que el ministro de transportes Graziano Delrio haya convocado una reunión mañana martes en la que quiere escuchar las razones del sector del taxi. Sin embaro, según informan los medios nacionales italianos, los profesionales no se muestran confiados ante los movimientos del ministro.

Durante estos días de huelgas y manifestaciones de los taxistas, los problemas con los conductores de VTC’s se han multiplicado. A lo largo de este fin de semana en Milán, muchos han sido los avisos de disputas entre taxistas y conductores de vehículos de alquiler. En Torino –donde está previsto que haya una asamblea de taxistas en el  día de hoy- y en Nápoles también ha habido momentos de tensión.

Durante las huelgas se han cubierto los servicios mínimos o de urgencia como traslados a los hospitales, trayectos de personas con movilidad reducidad o personas mayores.