El taxi impulsa un plan de turnos para evitar jornadas de 16 horas

* Nuevo reglamento para un transporte público
* El gestor modifica la opción elegida en el referendo para intentar contentar a autónomos y empresarios
* La norma se aplicará el 1 de noviembre y deja al margen al servicio de personas con discapacidad

BARCELONA. EL PERIODICO. CARLOS MARQUEZ DANIEL.- El taxi de Barcelona pasa por momentos de nerviosismo. No tanto por la evidente crisis de la demanda, que también, como por la sensación de que algo serio se mueve tras décadas en las que la profesión ha sufrido un letargo alimentado por las divisiones internas. Si nada extraordinario lo impide, el sector aplicará a partir del 1 de noviembre un sistema de turnos destinado a evitar esas jornadas laborales que en algunos casos llegan a 16 horas diarias. El Instituto Metropolitano del Taxi (IMT) aprobó el martes el nuevo reglamento.
Los turnos votados en el referendo del 22 de febrero ven la luz, aunque en el plan final también se intuyen retazos de la regulación horaria, la segunda opción más votada en aquella consulta en la que participaron el 69% de los cerca de 10.600 dueños de licencias activas. Entonces se aprobó trabajar de forma rotatoria cada mes por turnos de mañana (6.00 a 15.00 horas) o tarde (13.00 a 22.00 horas) y con libertad para hacerlo además por la noche de 22.00 a 6.00 horas. Ese sistema hacía coincidir a todos los chóferes durante dos horas del mediodía, cosa que no tenía demasiado sentido.
La resolución final, alaquella consulta en la que participaron el 69% de los cerca de 10.600 dueños de licencias activas. Entonces se aprobó trabajar de forma rotatoria cada mes por turnos de mañana (6.00 a 15.00 horas) o tarde (13.00 a 22.00 horas) y con libertad para hacerlo además por la noche de 22.00 a 6.00 horas. Ese sistema hacía coincidir a todos los chóferes durante dos horas del mediodía, cosa que no tenía demasiado sentido.
La resolución final, al margen de las excepciones concretadas a continuación, queda así: dos turnos de 5.00 a 14.00 horas y de 14.00 a 0.00 horas, quedando libre para todos el resto del día, entre la medianoche y las seis de la mañana. El mecanismo se distribuirá entre pares e impares y se cambiará el orden cada 15 días.

RELEXIONES A LA CARTA

Tras recibir casi 1.500 alegaciones, se optó por modificar el proyecto para adaptarlo a la realidad del taxi. Tres han sido, según detalla el concejal de Movilidad y presidente del IMT, Eduard Freixedes, las reflexiones principales a las que el instituto ha intentado dar respuesta. Por un lado, se ha decidido dejar al margen de la norma a los 87 vehículos que prestan su servicio a las personas con movilidad reducida ante el temor de que algunos usuarios queden desatendidos.
En segundo lugar, se ha establecido un turno especial para las licencias explotadas con dos conductores (2.702). Para estos vehículos se crea un horario de 7.00 a 17.00 horas y de 19.00 a 5.00 horas, de manera que puedan circular 20 horas y descansar cuatro. Por último, atendiendo ala alegación de mantener la libertad horaria que tantos taxistas aprecian como principal virtud de la profesión, se crean dos horarios –de 8.00 a 20.00 horas y de 20.00 a 8.00 horas– que permitirán mantener los hábitosde aquellos que han adaptado su rutina a la noche o al día.
En el caso de los taxis con un solo conductor, el titular podrá solicitar uno u otro sistema sin quedar atado de por vida a su elección inicial. Ante la posibilidad de que todos los conductores se acojan a la fórmula de las 12 horas diarias, Freixedes estima que es una opción que no se descarta, pero en cualquier caso asegura que todo deberá equilibrarse en función de las peticiones que vayan haciendo los conductores antes de que los turnos arranquen. «A nuestro entender, esta es la propuesta que mejor recoge todas las diferentes aportaciones realizadas por los representantes del sector. Por desgracia, no hemos conseguido una propuesta consensuada por las partes, pero es nuestra obligación como administradores tomar decisiones», resume el concejal Freixedes.
El presidente del IMT admite que el objetivo no puede ni debe ser buscar que el taxista gane más dinero. Según las cifras del instituto, la recaudación por conductor asciende a cerca de 4.200 euros. A esto hay que restar cerca del 40% por los costes de explotación (gasolina, seguro, mantenimiento del vehículo…). El objetivo, sostiene el edil, es que el taxis ta «gane lo mismo pero con menos horas, sin necesidad de alargar la jornada hasta las 16 horas como hacen algunos, poniendo en peligro su salud».

CONTRA EL TRAMPOSO

Para evitar la picaresca, el IMT obligará a los taxis a exhibir unas pegatinas que indicarán su turno de trabajo. También los conductores dispondrán, como sucede en ciudades como Nueva York, de una identificación en la que conste el nombre, la fotografía del conductor y el número de la licencia. El incumplimiento de la norma se considerará una infracción grave que supone una multa de entre 250 y 1.250 euros.
La propuesta de turnos deberá aprobarse el martes en el pleno del Área Metropolitana, pero hasta mañana, el sector puede presentar
una alternativa siempre que tenga la firma de todas las partes. Sería algo excepcional, así que, salvo sorpresas, el taxi inicia su recta final. hacia el sistema de turnos.

El sistema prevé reducir la flota en cerca de 3.000 vehículos diarios

Barcelona dispone hoy de unas 10.500 licencias. Con el día semanal, circulan de lunes a viernes 8.418 taxis, una cifra demasiado elevada para el nivel actual de demanda. El sistema de turnos prevé reducir la flota en cerca de 3.000 vehículos, algo que parece asumible, según los cálculos del IMT. Si un 15% de las licencias piden el horario de ocho de la mañana a ocho de la tarde, está previsto que a las dos de la tarde circulen 2.165 chóferes menos. A las cinco de la tarde, asciende a 4.314 menos. Si el 40% de los titulares cogen este horario, el descenso es inferior, pero siempre con valores muy por debajo del volumen actual.

Las claves
1. DIVISIÓN INTERNA

Históricamente, el sector del taxi se ha dividido entre empresarios que explotan más de una licencia y autónomos que llevan su propio vehículo. La ley del 2003 hizo del gremio un mercado abierto en el que cualquiera, sin tener credencial de taxista, puede gestionar un coche.

2. REPRESENTATIVIDAD

Otro de los problemas del sector era la falta de fiabilidad de sus líderes. Para tener interlocutores que tuvieran credibilidad, la Administración organizó unas elecciones en las que ganaron los más veteranos (Sindicato del Taxi) y la joven Unión de Taxistas Autónomos Metropolitanos.

PEQUEÑOS LOGROS

La llegada de CiU al gestor del taxi ha revolucionado el sector tras décadas en las que la división torpedeaba cualquier propuesta. En un año se han aprobado las licencias de siete plazas, se ha conseguido la parada de Sants y se ha mejorado el examen de taxista.

4 INCIDENTES AISLADOS

En agosto se produjeron incidentes de tinte xenófobo entre taxistas. Algunos conductores españoles no han digerido bien el aumento de extranjeros en el gremio. En el fondo de estos insultos reside una bajada del 30% de la facturación.

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